miércoles, octubre 31, 2012

LA TORRE: Destruccion - Creación

PALABRAS CLAVE: ESTRUCTURAS – RIGIDEZ – GOLPE – CATASTROFE – AISLAMIENTO – SOBERBIA – OMNIPOTENCIA – FATALIDAD – LIBERACIÓN - ILUMINACION

En el arcano anterior nuestro héroe estaba atrapado por su sombra, representada por el Diablo, parecía no darse cuenta hasta qué punto estaba esclavizado por sus pasiones. El apego y el sometimiento eran absolutos. Habíamos dicho también que si él no podía liberarse por sí mismo la vida iba a hacerlo por él. Esta es la clave del arcano “La Torre” y por ende su propuesta es la liberación.
Veamos la imagen del tarot marsellés. Nos muestra una torre sin ventanas y con una puerta muy pequeña. En la cúpula hay una corona que es impactada por una pluma, como consecuencia sus habitantes un hombre y una mujer caen uno a cada lado, y en medio de ellos caen también esferas de colores. A simple vista parece una contradicción: ¿es una desgracia o una bendición? La respuesta es: ambas cosas.
Concentrémonos por un momento en el símbolo de la TORRE y su utilización en el mundo antiguo. Dice Sallie Nichols que en primer lugar uno asocial la torre a la famosa la torre de Babel que se menciona en la Biblia, un edificio construido por Nemrod para conquistar el cielo y que según el relato provoca la ira y la venganza de Dios y por lo tanto es destruida. También eran utilizados como lugares de reclusión para prisioneros, y edificios pensados para conectar el cielo con la tierra. Sin embargo, la temática de la torre del tarot plantea el caso de dos personas que hacen de su propia torre su dios. Estaban aislados tanto del mundo externo como de la divinidad, creían no necesitar a nada ni a nadie, “permanecían cerrados a cualquier posibilidad de intervención milagrosa” dice S. Nichols “para conseguir tal cosa los dioses tenían que buscar un modo de entrar en ella, aunque fuera por la fuerza”. Sin embargo, como decíamos anteriormente, lejos de ser una fatalidad esta entrada es liberadora y su efecto mágico que conduce a la iluminación, está representado por las esferas de colores que caen al lado de los personajes. Ellos no las perciben, están demasiado shockeados por el impacto y totalmente tomados por la experiencia y su consecuente desenlace. El golpe viene directamente del cielo. Este impacto que en el tarot marsellés es realizado mediante una pluma se puede asociar con el rayo del dios griego Zeus (el dios del trueno y el rayo asi como también el protector de la ley y la moral), y Thor el dios nórdico que portaba su martillo y era conocido como el dios destructor, tal como dice R. Wang. El aclara que en todas las culturas el dios del cielo tiene muchas responsabilidades, además del hecho de la creación. En primer lugar, el es el protector arquetípico de sus criaturas, lo cual significa que debe preservar y proteger el orden y la integridad de lo que el mismo ha creado. Pero su fuego iluminador es también lo que destruye para que así el ciclo destrucción – creación vuelve a comenzar. Dice Wang que el arquetipo del Padre que hace la guerra está separado del Padre Celestial, lo cual queda muy claro en la mitología romana, Marte era el dios de la guerra seguido por Júpiter.
Aunque en un primer momento las personas expulsadas de la torre se quejen de su destino, pregunten a dios ¿por qué a mi?, no pueden ser conscientes del efecto salvador de este acontecimiento, se sienten abandonados por él y no alcanzan a ver su mano, dios no los ha olvidado, todo lo contrario, ellos se han olvidado de dios, pero él nunca se olvida de sus criaturas. La sutileza de ello se encuentra representada por la pluma que es un elemento suave que la divinidad utiliza para derribar la torre, lo cual nos hace pensar qué rígida debió haber sido esta torre para que una pluma la derribe. Tal como dice el Tao lo que cuanto más rígida es una estructura más fácil es tumbarla. La corona, es símbolo del ego entronizado de los personajes que la divinidad se encarga de poner en su lugar.
Las torres son estructuras construidas por el hombre. Paradójicamente en la antigüedad se utilizaban como prisiones y lugares de adoración a dios, en la actualidad para el hombre urbano, contemporáneo también suele ser una prisión moderna. Se despierta en el piso del edifico donde vive, y pasa ocho horas en su oficina ubicada en otra torre, lejos de la naturaleza, respirando un aire artificial. Cada día se construyen torres más sofisticadas, “inteligentes” que parecen templos para adorar al sistema en el que los hombres están inmersos. Sin embargo las torres también pueden ser prisiones psicológicas: matrimonios acabados, trabajos insatisfactorios, ideologías, fanatismos, mandatos familiares, y cualquier otra cosa que nos aísle. Entonces nuestra pareja nos deja y la empresa quiebra. Nuestro mundo se desmorona súbitamente. Podemos sentirnos desgraciados y aferrarnos a lo poco que queda de nuestra torre, o bien iluminarnos, hacer visible la intervención divina detrás de la experiencia. Para Jung “la iluminación significa un repentino, inesperado, y poderoso cambio de la condición psíquica”. Simbólicamente la iluminación se relaciona con el falo así como con la serpiente y su función iluminadora, vivificante, fertilizadora, transformadora y curativa. El derrumbe de la torre puede hacernos conscientes de cuán rígidos eramos respecto de determinados aspectos, vínculos o ideas en nuestras vidas y consecuentemente “iniciarnos” para que podamos construir espacios diferentes, más flexibles, en donde podamos dejar entrar la luz, y estar protegidos sin dejar de conectarnos con el exterior. Así una vez que podamos recuperarnos del shock, despojados al fin de nuestras estructuras, logremos prepararnos para la experiencia de la entrega total que nos espera cuando nos encontremos con nuestro próximo arcano, La Estrella.

 

2 comentarios:

  1. Saludos. Primera vez por aquí... ¡Felicidades por tu trabajo! Me interesa mucho el tarot junguiano... Ya te haré unos comentarios después de leer tu blog con atención.

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  2. Gracias, son bienvenidos tus comentarios!!!

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